La dirección de cremallera es un componente integral que se utiliza en numerosos vehículos, incluidos automóviles, camiones e incluso autobuses. Ayuda al conductor a dirigir las ruedas y mantener la dirección del vehículo. Este mecanismo es especialmente deseable ya que proporciona controles suaves y precisos. La cremallera y el piñón son el tipo de sistema de dirección que utiliza dos piezas especiales, conocidas como engranaje de cremallera y piñón, para facilitar el giro de las ruedas en la dirección que desea el conductor.
Los vehículos modernos generalmente utilizan el mecanismo de dirección de piñón y cremallera. Cuando el conductor gira el volante, hace que gire el piñón. Este engranaje está unido a la cremallera, una barra metálica recta con dientes en un lado. A medida que el piñón gira, empuja y tira de la cremallera de un lado a otro. La cremallera empuja o tira de los otros elementos, conocidos como tirantes, mientras se mueve. Estos tirantes están unidos a las ruedas. Por lo tanto, a medida que la cremallera se mueve, ayuda a girar las ruedas hacia donde el conductor pretende ir.
Las fugas de líquido son un problema común en las direcciones de cremallera. Si ves líquido alrededor de las barras de dirección o de la cremallera de dirección, es posible que tengas una fuga. Dirígete primero al depósito de líquido de la dirección asistida. Si el nivel es bajo, es posible que tengas que agregar más para que el sistema de dirección funcione correctamente.
La dirección rígida puede ser otro problema que a veces hace que resulte difícil conducir. Esta sensación de rigidez puede indicar que el engranaje de piñón o cremallera está roto y es necesario reemplazarlo. ¿Sientes que el volante está flojo o que hay vibraciones mientras conduces? Estos también pueden indicar un problema con el sistema de dirección de cremallera.
Si nota estos problemas, lo mejor sería llevar su automóvil a un mecánico o a un técnico profesional. Ellos saben cómo diagnosticar un problema con su automóvil y pueden ayudarlo a solucionarlo. Hacer que un profesional revise su vehículo también puede evitar que pequeños problemas se conviertan en problemas más graves en el futuro.
Pero, como vimos antes, esto tiene sus desventajas. La mayor desventaja es que la reparación puede ser costosa. Dado que el sistema de piñón y cremallera está tan estrechamente vinculado, una reparación a menudo implica el reemplazo completo de varias piezas a la vez. Eso puede significar más facturas de reparación para los conductores. Otra razón para ser cauteloso es que el sistema puede tener fugas, lo que requiere que todos los conductores revisen constantemente para detectar signos de pérdida de líquido, lo que resulta en problemas con la dirección.
A continuación, se ofrecen algunos consejos sencillos que puede utilizar para realizar el mantenimiento del sistema de dirección. En primer lugar, deberá comprobar periódicamente el nivel del líquido de la dirección asistida. Esto incluye comprobar el nivel del líquido en el depósito y comprobar si se encuentra en el nivel correcto. Preste atención a posibles fugas o ruidos extraños al girar el volante. Esté atento a los problemas y no se tome el trabajo de hacer un diagnóstico por su cuenta; si nota algo extraño en su coche, solicite a un profesional que lo revise.